Es primordial contar con una buena ventilación en nuestro hogar. Tenemos que evitar que el aire se estanque en un mismo entorno, y se renueve. El ser humano está expuesto continuamente a muchas enfermedades que ponen en riesgo nuestra salud. Por ello, con el uso de unas ventanas funcionales y eficientes lograremos prevenir algunas enfermedades, ya sea en el lugar de trabajo como en nuestras propias casas.
Tenemos que estar continuamente ventilando las habitaciones, renovando cada día el aire que se encuentra dentro de ellas.
¿Cómo afecta la ventilación a tu salud?
Cuando no ventilamos de manera correcta, el aire se vuelve más caliente y pesado. Si queremos evitar acumulación de humedades, en la cocina, ducha y otros lugares de la casa que incrementen este hecho, debemos abrir las ventanas y crear una ventilación adecuada.
A continuación comentaremos algunas características que afectan a nuestra salud:
Físicas
- Estrés y falta de oxígeno para el cerebro.
- Afecciones respiratorias.
- Hipoxia.
- Anoxia.
- Pérdida de energía.
- Aspergiloma.
- Hongos y moho ocasionadas por la humedad, que afectan directamente a nuestra salud.
Formas de resolver la mala ventilación
- Renovar el aire todos los días abriendo las ventanas.
- Ventilar las habitaciones por la mañana, eliminando la humedad de la noche. Se recomienda dejar abiertas las ventanas mínimo 30 minutos aproximadamente.
- Abrir dos ventanas en dos lugares opuestos de la cada, para generar corriente rápida y eficaz.
- Disponer de ventanas de buena calidad que ayuden a obtener una buena ventilación.
En definitiva, si quieres conseguir una mejor ventilación de la manera más económica y eficiente, disponer de unas buenas ventanas es la clave para garantizarlo. Además esta alternativa no requiere de ningún gasto técnico y económico.